Por: Amanda Díaz de Hoyo
Desde hacía
días estaba preocupada por mi blog. En realidad el tiempo, aunque suene
clichoso, me estaba traicionando con cuchillito de palo e intensión de
acero. Mucho trabajo en las 20 cosas que
siempre tengo, y se sumó una más…ir a una demostración de toda la UPR frente al
Capitolio para dar una lección magistral a los que se pasan detrás de la silla
y en la comodidad del aire, tomando decisiones sin necesariamente ver en
amplitud más allá del parking que rodea el edificio.
El análisis
de lo que hacen se queda ahora en el tintero, pues tengo entre ceja y ceja, la
cara de miles de estudiantes, que defendieron los intereses de la Universidad
del Estado Libre Asociado de Puerto Rico, de una manera muy distante de las
manifestaciones de principios de este siglo, o de finales del anterior.
Ciertamente
me animé al coro de voces, profesores, personal no docente, de apoyo,
estudiantes, a pedir que quienes hacen las leyes y las trampas, vieran que de
una forma u otra, todos tenemos el impacto de la UPR en nuestro diario vivir,
lo reconozcamos o no.
Lo que vi
desde antes de comenzar la manifestación educativa fue la fraternidad entre
todos los presentes, que se animó en cantidad con la peculiar alegría de los
jóvenes, que a son de pancartas y música, carteles y camisetas alusivas,
unieron todos los colores representativos del sistema universitario con el
estribillo de: 11 Recintos 1 UPR.
Si en
algún momento un legislador lee Meneando
y Mangoneando, el blogsito de yours truly le voy a dar un ejemplo de
cómo la UPR impacta su diario vivir:
Tiene casa,
porque un ingeniero egresado probablemente de la UPR hizo el plano que un arquitecto
de la UPR preparó. Tiene energía de la
que sea, porque hay mentes que trabajan y se prepararon en la UPR. Es más, sabe
leer y escribir, porque fue a una escuela donde posiblemente el maestro que le dio
clase fue a la UPR a prepararse. Si le duele la muela o respira el aire con
polvo del Sahara, sepa que el dentista y el neumólogo pueden haberse formado en
la UPR. Le sirven un plato de comida y se harta como cerdo, recuerde que los
frutos vienen de la tierra, y la agricultura se trabaja desde la UPR. Si le
prepararon los alimentos en la cafetería del Capitolio, los cursos de cocina e
inocuidad alimentaria, la nutrición y la dietética salieron de la UPR. Si
quiere escuchar música, hablar inglés y otros idiomas, sumar, restar y hasta
tener su automóvil, hay algún componente de la UPR en todo esto.
Los
científicos que mejoran la calidad de la vida de muchos, no solo en Puerto Rico
sino en toda la Cuenca del Caribe, generalmente están en la UPR. Tan reciente
como el terremoto de Nepal, supe de los estudiantes nepalíes que estudian en la
UPR, y que se enteraron de los ofrecimientos académicos en el Web. Hablando de
temblores y terremotos, la Red Sísmica
está en la UPR…
Antes de pensar en quitar un chavo de la UPR, piense en
el impacto social, cultural, histórico que todos tenemos como Universitarios.
Me alegro haber formado parte del Día cuando juntos fuimos UPR, porque aunque uno
se haya graduado e incluso viva fuera del país, hay un pedazo de UPR en el DNA,
junto con la mancha de plátano.
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