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viernes, 17 de enero de 2014

El valor de una palabra en San Juan- $millones

Esto de que en San Juan tenían planificado catear a las personas que fueran a un evento multitudinario me estuvo tan malo como el anuncio pancarta de la avenida Baldorioty de Castro que ofrece servicios de blindado de automóviles. 

No  estoy contra la seguridad ni mucho menos, pero el uso de la palabra CATEO ha costado más dinero que poner en funciones un plan más activo de seguridad. CATEO, cuando buscamos el concepto que tenemos localmente, es virar como media a uno, palpando cada pulgadita para ver que lleva en su persona. Ahí está precisamente el error. Se parte de la premisa errónea de que todo el mundo es un bandido y que hay que investigarlo. Me cuestiono hasta cuándo tenemos que soportar este tipo de agravio.

En vez de poner personal a catear, que bien podría ser manosear, para luego llenar de jaulas a la ciudad capital, hubiera sido mejor, verificar que todas las cámaras de seguridad del Viejo San Juan y zonas aledañas estuvieran en funcionamiento.  Establecer dos o tres pantallas grandes en la que las personas se vieran, claro en lugares estratégicos. Los del Totem verían a los que estaban en la alcaldía y así por el estilo. Esto hubiera sido más económico que contratar a los pone verjas, quita verjas, y pone vallas.

En lugares predeterminados, hubieran puesto puntos de cotejo --que no es lo mismo que cateo--, y activar un dispositivo de seguridad con agentes de orden público con identificación pero en ropa de civil, además de uniformados. La venta de bebidas alcohólicas debería estar monitoreada, de manera tal que a cierta hora dejara de despacharse licor.

El malestar de la ciudadanía es el que nos sigan achacando que somos malos, que nos juzguen por unos cuántos descontrolados. Somos nosotros los que tenemos que poner orden en nuestras vidas y acciones, y comportarnos de manera civilizada. Digo, esto empieza por la casa, pero no puede gobierno alguno generalizar de que todos somos deshonestos, cafres, y bandidos.

Nos toca a todos poner un toque de civilización porque sino nos estarán cateando cada vez que les de la real gana y pa´mi esa no era. A parte, que le cuesta al bolsillo de todos un montón de chavos el asuntito. A portarse bien y dejar la cafrería pa´que no nos cateeeennn hasta el ñú.

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